A pesar de estar aún a nueve meses de distancia de la ceremonia de la siguiente edición de los Premios de la Academia 2021, se está considerando la posibilidad de posponerse, debido al coronavirus. De ser así el Oscar se uniría a otros cientos de eventos, películas y convenciones que se han cancelado o pospuesto como resultado de la situación global.
Hollywood está esencialmente estancado en este momento, desde pequeños programas de televisión hasta exitosas películas de Marvel en pausa durante el rodaje. Además, es difícil saber en este momento cuándo las cosas pueden volver a la normalidad.
La Academia de Artes y Ciencias Cinematográficas es consciente de que este es un momento excepcional para la industria del cine. Y como resultado, hizo un movimiento sin precedentes al permitir que las películas originalmente planificadas para un estreno en cines sigan siendo elegibles para los Oscar del 2021. Esto permite que las producciones que terminan en streaming como resultado de la pandemia puedan ser consideradas. Dejando en claro, eso sí, que esto se llevará a cabo solo para la edición del próximo año y hasta que las salas de cine puedan abrir, aunque este es un escenario muy distante aún para algunas partes del mundo, donde esta figura está aún a meses de distancia.
Según Variety, la ceremonia de los Oscar 2021 está en peligro, al menos como se la tenía planeada hasta ahora. Indicando que "es probable que se posponga”. Sin embargo, ABC aún no ha cambiado la fecha inicial que es el 28 de febrero, tampoco ha insinuado una nueva fecha, ni algún plan extra de contingencia de darse el caso, de igual manera se desconoce como un posible retraso podría afectar la elegibilidad para ciertas películas.
A pesar de que es solo un rumor, la Academia está en una posición única. Incluso si es teóricamente seguro celebrar la ceremonia en ese punto, puede que no tenga sentido hacerlo. Por un lado, los Oscar involucran no solo a una gran cantidad de personas que asisten al espectáculo, sino también a cientos de personas que trabajan detrás de escena, lo que los convierte en un desafío particular. Además, es imposible saber cómo será la industria del cine en ese momento y cuántas películas serán elegibles. Podría dar lugar a un escenario en el que incluso los ganadores se sientan decepcionados por la competencia inadecuada, que es un resultado que nadie en Hollywood quiere.
De posponerse la ceremonia, es probable que establezca también un precedente para otras galas de premiación. Como los Oscar son sin duda la mayor competencia durante la temporada de premios, otros como los Globos de Oro, BAFTA y los SAG podrían seguir su ejemplo.
Independientemente de lo que suceda, tanto los fanáticos como los que trabajan en la industria cinematográfica deberían sentirse aliviados al escuchar que la Academia está pensando en lo que va más allá de una ceremonia, sino que está preocupada por toda la logística humana que ésta conlleva y que en estos momentos hay que proteger.
