Por Michelle Dassum, desde Cannes
“Podría contarles algo de la nueva Indiana Jones, pero tendría que matarlos a todos”, dice entre sonrisas y risas, el carismático danés Mads Mikkelsen, uno de los actores europeos más versátiles y eclécticos, quien ha demostrado hace mucho que el continente le quedó pequeño. Ahora es una figura internacional, requerido una y otra vez por Hollywood, interpretando papeles icónicos, que van desde un villano de 007, al caníbal Hannibal Lecter, o de un personaje de Star Wars al cruel Grindelwald del universo mágico de J. K. Rowling, sin olvidar sus orígenes autorales y escandinavos, para colaborar en proyectos más modestos.
Su presencia en la Croissete del reciente Festival de Cannes no ha sido una casualidad. En el 2012 recibió la Palma de Oro a mejor actor por su impecable actuación en The Hunt. Cuatro años después fue parte del jurado de la Sección Oficial de Cannes, el festival más prestigioso del planeta. Con estas credenciales, Mads Mikkelsen se consolidó definitivamente en el certamen francés.
Durante el mencionado festival francés se hizo presente para brindar una charla magistral, el clásico Rendez-vous with (cita con) con el que Cannes brilla cada año, intentando no comprometer la cláusula de confidencialidad que le impone silencio sobre Indiana Jones 5.
Las filas para ingresar a escucharlo en la sala Buñuel del Palacio de Festivales y Congresos fueron eternas.
Hace pocos meses finalizó oficialmente el rodaje de la nueva entrega de la saga aventurera creada por Steven Spielberg, esta vez dirigida por James Mangold, filmada en Inglaterra, Escocia, Italia y Marruecos, por un equipo actoral encabezado por Harrison Ford, Phoebe Waller-Bridge, Toby Jones y el español Antonio Banderas. Sin embargo, poco le dejan contar: “Hay un pequeño cambio, la película vuelve a la vieja escuela tanto en el tiempo como en el aspecto, y la sensación en conjunto. Podría detallarles más, pero tendría que matarlos”, bromeó el actor.
Además, admitió que, a diferencia de sus participaciones en las sagas de Bond o Star Wars, conocía las películas previas del popular arqueólogo: “De niño admiraba a Bruce Lee y a Buster Keaton. Magníficos actores y especialistas que conquistaban a la audiencia con la historia y sus actuaciones. Ellos me siguen inspirando mucho hasta el día de hoy”.
El actor, de 57 años de edad, además recalcó: “Nunca toqué todas las puertas, aunque después de Bond sí busqué un agente en Estados Unidos y fueron mis películas danesas las que lo hicieron por mí, porque ya estaban en el mapa”. Y fue así como después de enfrentarse al super agente 007 en Casino Royale, Mikkelsen acabó de consagrarse en Hollywood al asumir el rol de Hannibal Lecter en la serie televisiva que abarcó tres temporadas (disponibles en Amazon Prime), alguien con quien reconoce tiene ciertas concomitancias. “Intento que la gente conozca lo mínimo posible acerca de mí. Por eso mantengo mi vida privada secreta. Trabajar frente a las cámaras implica ser un mentiroso profesional. No me gustaría que mis roles tengan menos credibilidad ante el espectador si este conociese el verdadero yo”, afirmó.
Al compartir su experiencia marcada por una variada trayectoria -desde sus raíces en la danza y teatro hasta su remarcable presencia dentro del séptimo arte- indicó: “Nunca estuve interesado en dedicarme a la actuación. De niño aspiraba a ser futbolista, fui gimnasta de joven, también bailarín profesional”.
Precisamente fue el baile que lo llevó a convertirse en actor, señaló. “Tampoco busqué un espacio en Hollywood, pero las películas en Dinamarca me dieron la oportunidad de ir a nuevos mercados sin proponérmelo”.
Durante su larga intervención, el actor danés brindó un consejo para los aspirantes jóvenes apasionados por el cine. “Todo lo que puedas experimentar con tus amigos, familia, conocidos, vale la pena. Esas son las cosas que inspirarán, y cuando eso ocurra, agarra tu cámara, concéntrate en una historia y sigue adelante. En la Dinamarca de los 80, el cine cambió completamente, toda una generación estaba a la cabeza. La nueva generación necesita hacer lo mismo y romper con el estereotipo de tener que estar siempre dirigida por directores mayores. Por eso, mi consejo para los interesados en esta industria es que comiencen a hacer todo lo que más puedan en su propio país, dentro de los medios que dispongan, porque en algún momento los acabarán viendo”, señaló.
Sus diferentes interpretaciones a lo largo de su carrera lo han hecho merecedor de premios y nominaciones, destacando siempre su impecable actuación. Esta vez en la edición aniversario 75 del Festival de Cannes habló de ello ante el público. “Estoy orgulloso de mi trabajo, muy buenos trabajos, aunque los peores también me han llevado adonde estoy ahora”, destacó.
También admitió no sentirse intimidado por ningún rol, aunque es muy claro de los retos que lo involucran. “Realmente no tengo miedo de asumir ciertos papeles. No estoy intimidado, pero soy consciente de los desafíos. A veces me digo: ‘esto es perfecto, pero me va a costar mucho’. Tienes que ser honesto, a veces tienes que ser lo suficientemente valiente para decir ‘no, este es un papel para otra persona”.
El pasado abril, Mikkelsen estrenó Fantastic Beasts: The Secrets of Dumbledore, en la que sustituyó a Johnny Depp. “Intenté hacer mi propio personaje. Soy un gran fan de Johnny Depp y sé que tratar de copiarlo sería un suicidio creativo”, sentenció.
Al concluir este tan esperado rendez vous habló sobre las plataformas y salas de cine, hacia las cuales el actor expresó su apoyo. “Tenemos que preguntarnos: ¿las plataformas van a desaparecer? No, ¿entonces? Entonces tenemos que encontrar un equilibrio. El cine es una forma de arte y queremos que permanezca como lo recordamos, pero eso no es posible. Tiene que evolucionar y crecer. Hay espacio tanto para las plataformas como para el cine”.